Por Alejandra Ocampo
El próximo domingo 15 de junio, la edición 2025 de The Queen’s Cup tendrá a su campeón, cuando los dos ganadores de las semifinales, Park Place y La Dolfina Marqués de Riscal, se encuentren en The Queen’s Ground, la cancha principal del espléndido Guards Polo Club, en Smith’s Lawn, Windsor Great Park, a poco más de una hora de Londres, en búsqueda de uno de los trofeos más codiciados del polo.

La edición 2025 de la Queen’s Cup tiene como particularidad dos milestones – por un lado, Guards Polo Club cumplió 70 años el pasado 25 de enero, ya que el club fue fundado por el Príncipe Philip Duque de Edimburgo y el consorte de la Reina Elizabeth II, allá por 1955. Y por el otro, la Queen’s Cup cumple 65 años, ya que la misma fue establecida en 1960, en honor a la Reina Elizabeth II. Un lugar exquisito como pocos, Guards Polo Club representa lo mejor de la tradición británica, a través de sus fuertes lazos con la familia real más famosa del mundo, la dinastía Windsor, creada en 1917 por el Rey George V.
Pero antes de ir a la definición de la Queen’s Cup 2025, vale la pena hacer un recorrido por la historia tanto del club como de este torneo, que se disputa entre fines de mayo, hasta mediados de junio. Una época que se conoce como la temporada londinense, que reúne a lo más selecto de la sociedad británica, en diferentes eventos. Y entre ellos está, por supuesto, la Queen’s Cup.
EL PRINCIPE QUE QUERIA JUGAR AL POLO CERCA DE CASA
Guards Polo Club nació por iniciativa del Príncipe Philip Duque de Edimburgo y de su grupo de amigos con quienes solía jugar al polo, mayormente en Cowdray Park Polo Club. Pero por aquellos años – estamos hablando de los 50 – el recorrido de Windsor hasta West Sussex era tedioso y largo; con lo cual, Philip pensó que podía tener un lugar para jugar al polo cerca de su casa, es decir en los terrenos de Windsor, tradicionalmente propiedad del monarca. Así, Philip y sus amigos decidieron recurrir a la Reina, con el objeto de solicitar su permiso para crear un lugar para jugar al polo en la zona de Windsor. Elizabeth, reconocida por su pasión por los caballos, no dudó un instante y aceptó inmediatamente. El 25 de enero de 1955 abría sus puertas The Household Brigade Polo Club, nombre que mantuvo hasta 1969, cuando se denominó definitivamente Guards Polo Club. Philip fue designado Presidente del club, cargo que mantuvo hasta su muerte, el 9 de abril de 2021.

UNA COPA PARA LA REINA
Ese mismo año, 1955, The Household Brigade Polo Club organizó su primer torneo, la Royal Windsor Cup. El club fue avanzando hasta que cinco años después, en 1960, llegó el turno de rendirle tributo a la monarca – así nació la Queen’s Cup, que se convertiría en el certamen más relevante del club y cuyo primer campeón fue Centaurs, con Jorge Marin Moreno, John. Lucas, Guillermo Gracida Sr. y Ellie de Rotschild. Su Majestad fue siempre la encargada de presidir la entrega de premios. Con el tiempo, la Queen’s Cup se convirtió en uno de los certámenes más competitivos del calendario de polo internacional, atrayendo a los mejores jugadores del mundo, quienes en más de una ocasión han admitido que es uno de sus favoritos, no solo por el alto nivel de juego y de caballos, sino por la posibilidad de codearse de alguna forma con la familia real británica.
LA REINA ECUESTRE
Por cierto, reconocida apasionada y experta en caballos, la Reina Elizabeth II disfrutaba conversar con los polistas en la entrega de premios. Los jugadores destacaban siempre el gran sentido del humor de la monarca, pero por sobre todo, su gran pasión por los caballos, que la llevaba a preguntarle a los polistas todo sobre sus codiciados ejemplares.
Al respecto, y sobre sus reiterados encuentros con la segunda monarca más longeva de la historia, Adolfo Cambiaso, múltiple ganador del certamen, recuerda: “Siempre me pareció una persona muy normal; la vi muchas veces, en la Queen’s Cup e incluso en exhibiciones benéficas. Le encantaban los caballos, era fanática. Siempre preguntaba los pedigrees, donde jugaban, si las yeguas eran argentinas o inglesas. Le divertía saber de sus líneas de sangre, y además muy fanática del polo, una persona que le ha hecho increíblemente bien al deporte. La Queen’s Cup fue siempre muy famosa por ella, por entregar los premios”.

¿PROTOCOLO? ¿CUÁL PROTOCOLO?
Una de las anécdotas más famosas de la Queen’s Cup fue una saltada de protocolo que recorrió el mundo, y tuvo como protagonista a Facundo Pieres. Facundo, como Adolfito, fue un habitué a la hora de recibir premios de manos de la Reina. En 2014, Facundo, junto a Zacara, había ganado la Queen’s Cup por segundo año consecutivo, y su yegua, Open Galáctica, fue elegida como el mejor ejemplar de la final. La Reina entregó la manta y sucedió lo impensado – al momento de la foto, Facundo, con toda la naturalidad del mundo, colocó una mano sobre el hombro de la soberana, que horrorizó al protocolo y a los medios británicos. Lejos de todo el horror mediático y protocolar, la Reina pareció disfrutar del momento. Un dato más – ese año, cuando Open Galáctica volvió a ganar la manta la Reina, demostrando una vez más sus extraordinarios conocimientos sobre caballos, le dijo a Facundo que era la misma yegua que le había premiado el año anterior.
LA COPA DE LA REINA… PERO SIN LA REINA
La última vez que la Reina Elizabeth II protagonizó la premiación de su torneo fue en 2019, cuando le entregó el trofeo a David Paradice, quien con su equipo, Scone, en su primera presentación en el alto handicap británico, fue la gran sorpresa al ganar la Queen’s Cup (y dicho sea de paso, la primera para Nicolás Pieres, el único de la familia que aún no la había ganado). Si bien Elizabeth terminaba convirtiéndose en la gran protagonista de cada final, pegó el faltazo a la entrega de premios en cuatro ocasiones: en 2011, cuando debió asistir a un almuerzo por los festejos de los 90 años de Philip. Tampoco estuvo en 2020 y 2021 por la pandemia de COVID; y en el 2022, el año de su Jubileo de Platino. Posteriormente, y tras su fallecimiento, el 8 de septiembre de 2022, el encargado de la tarea es su hijo y sucesor, el Rey Charles III. El debut de Charles en la entrega de premios de la Queen’s Cup fue en 2024, cuando le dio la copa a Talandracas, el equipo de la familia Carmignac, que había obtenido el torneo por segunda vez. El dato curioso es que Talandracas nunca recibió la copa de manos de Elizabeth – en 2011, cuando la ganaron por primera vez, bajo una lluvia torrencial, el que asistió a la entrega de premios fue el nieto de Elizabeth, el Príncipe Harry.

CLAIRE, SHEIKHA MAITHA Y CORINNE, LAS ÚNICAS MUJERES QUE GANARON LA QUEEN’S CUP
Es habitual que haya mujeres compitiendo en la Queen’s Cup; en su mayoría, son patronas, pero también lo hacen las jugadoras profesionales. En 2025, estuvo Hazel Jackson, como integrante de Dubai. Patronas o profesionales, hubo tres mujeres que lo ganaron. La primera fue la pionera, la inolvidable Claire Tomlinson, allá por 1979, con Los Locos. Pero la debió pelear – la Hurlingham Polo Association (HPA) le negaba la posibilidad de jugar torneos de alto handicap, aún con sus 5 goles que muchas veces superaba a varios de los participantes de la Queen’s Cup. Pero a fuerza de insistir y de demostrar lo que valía, lo logró… y también la ganó.
Debieron pasar varios años hasta que otra mujer se llevara la Queen’s Cup. Recién en 2021, Sheikha Maitha fue campeona con su equipo, UAE; y en 2023 fue el turno de Corinne Ricard y Murus Sanctus.
LORD LOUIS MOUNTBATTEN Y SU INFLUENCIA EN EL POLO DENTRO DE LA FAMILIA REAL
Si bien los royals británicos ya jugaban al polo a principios del siglo XX, la fuerte tradición del polo en la familia real fue instaurada por Lord Louis Mountbatten, un apasionado del polo, que llegó a patentar un modelo de taco que había inventado. Lord Mountbatten, además de ser un extraordinario oficial naval, ha sido una figura significativa en el mundo del polo, y quien le pasó su pasión por del deporte a su sobrino, Philip y luego a su sobrino nieto, Charles, de quien fue su mentor y “abuelo honorario”. Lord Mountbatten, además, era una figura de presencia constante en Guards, sobre todo para ir a ver jugar a su protegido, Charles. Philip, que alcanzó los 5 goles de handicap, jugó dos veces la Queen´s Cup (1964 y 1966) con su equipo, Windsor Park, pero Charles (que llegó a los 4 goles), tuvo más suerte – en 1986 fue campeón con Les Diables Bleus, junto a Memo Gracida, Guy Windenstein y Rodrigo Vial. Por cierto, a Charles, quien hoy es el Presidente del club, heredando el cargo de su padre, siempre le gustó jugar de back.
HAY UN REY EN LA CANCHA
Desde su ascensión al trono, el Rey Charles III ha demostrado estar muy cerca de la gente, interesándose por sus actividades, su vida diaria, visitando diferentes instituciones y sobre todo, saludando a los entusiastas royal fans, estrechando manos e incluso intercambiando algunas palabras y regalos con su gente. Y en el polo no fue la excepción – durante el half time (es decir, el descanso largo, que se produce luego del tercer chukker; la Queen’s Cup se juega a seis chukkers) – los espectadores invaden la cancha para tapar los agujeros (stomping divots) y darse una vuelta. Ante el asombro de los espectadores, Charles, el Rey de Gran Bretaña, bajó del palco del Royal Box; con su traje color crema y anteojos de sol, se lo vio mezclado entre la gente, caminando tranquilo, y haciendo su propio stomping divots.
THE QUEEN’S CUP – LOS ULTIMOS CINCO CAMPEONES
2020 – GREAT OAKS/LES LIONS: Dhillon Bacon, Camilo Castagnola, Bartolomé Castagnola Jr., Santiago Laborde

2021- UAE: Sheikha Maitha, Tomás Panelo, Polito Pieres, Tomás Beresford

2022 – GREAT OAKS: Dhillon Bacon, James Beim, Juan Martín Nero, Cruz Heguy

2023 – MURUS SANCTUS: Corinne Ricard, Alejandro Muzzio, Polito Pieres, Marcos Araya

2024 – TALANDRACAS: Edouard/Hughes Carmignac, Rosendo Torreguitar, Alejandro Muzzio, Polito Pieres
